Chicos y chicas, perro salchicha, profe gritona!! Les cuento que en este preciso momento el blog cumple una semanita de vida! Sisi, estoy en la misma clase de la semana pasada, la que generó en mi tal embole suficiente como para crear este bello blog.
Les cuento un tema que me tiró mi amigo Diegote:
-Supongamos que creemos en la reencarnacion, no? Que nuestras almas van de un cuerpo a otro desde el comienzo de los tiempos, si? entonces...
-Te sigo.
-Teniendo en cuenta que hace no más de 150 años había aproximadamente 2 millones de personas en el mundo y ahora somos 6000 millones, cómo se completa el faltante?
Son almas nuevas?
-Si es asé, todo indica q son almas nuevas...
-Bueno, nada, eso... También podría ser que las almas viejas se fueron dividiendo y que hoy por hoy sólo somos una partecita de un alma completa.
-Me gusta tu teoría...
Siguió un poquito la conversación, esta vez arranqué yo:
-O sea, vos crees en una reencarnación terrenal.
-Yo no creo en la reencarnación; no me parece, que se yo.
-Crees que tenemos alma?
Y no me contestó... Diegote, por favor contestame.