Este fin de semana pasado contamos con la gloriosa visita de mis tíos Daniel y Tutty. Con mi Tío Daniel, uno de mis mentores, nos consideramos víctimas de nuestras mujeres, hombres de cuerpo, alma y orgullo golpeados y abatidos... Reducidos a escombros, y transformados en simples "si querida" o "no querida".
Juntos desarrollamos un par de teorías, presentadas aquí debajo:
1) Las mujeres, al divorciarse, piden el 50% de los bienes para poder "re-hacerse". Es decir, terminan la relación y como tienen que volver "al mercado" necesitan remodelar. Para eso, necesitan financiación. Creo que se entiende la teoría de porqué piden el 50%.
2) Las mujeres, cuando las conocemos y son nuestras novias, nos hechizan. Nos enamoran y emboban. Después del casamiento, y no sabemos muy bien porqué, dejan de ser hechiceras y se vuelven brujas.
Hoy duermo en el sofá.